Aqui tienes una presentación para esta celebración
21º ORDINARIO. “NADIE PUEDE VENIR A MÍ, SI EL PADRE NO SE LO CONCEDE”
Ciclo B
CANTO DE ENTRADA: “Ven a la fiesta”
MONICIÓN DE ENTRADA:
Jesús nos invita a vivir de un modo nuevo, como Él vivió, claro que hay cosas que nos pueden costar o parecer difíciles, o que nos dan miedo. Sin embargo no estamos solos, Dios está con nosotros siempre.
El tiempo que le dedicamos a Jesús, no es una pérdida, sino una ganancia. Debemos confiar en el Señor y decirle como le dijo Pedro: “Tú tienes palabras de vida eterna”, tus palabras son verdad, son seguridad, son alegría, son paz, etc.
Animémonos a estar muy unidos a Jesús, Él tiene palabras que nos llenan de vida y nos muestran el verdadero amor de Dios para con nosotros. Así nosotros podremos compartir y contagiar ese amor y esa fuerza con los que nos rodean.
ACTO PENITENCIAL:
— Señor, porque a veces dudamos de tu presencia. Señor, ten piedad.
— Señor, porque a veces no escuchamos tu palabra. Cristo, ten piedad.
— Señor, porque a veces nos olvidamos de hablarte en la oración. Señor, ten piedad.
GLORIA
ORACIÓN COLECTA:
Padre bueno que buscas que todos permanezcamos unidos a Ti haz que la Palabra inunde de vida eterna nuestros corazones. PJNS.
LITURGIA DE LA PALABRA
LECTURA: JOSUE 24,12a.1517.18b
CANTO: “Aleluya”
EVANGELIO: San Juan 6, 60-69
HOMILÍA:
Frase para comentar:
“Señor, ¿a quién vamos a acudir? Tú tienes palabras de vida eterna”
Imagen para comentar:
ORACIÓN DE LOS FIELES:
–Por el Pueblo de Dios que renueva su alianza de amor y fidelidad con el Dios de la Vida y la libertad. Oremos…
-Por los que sufren dudas y vacilaciones en el seguimiento del Hijo de Dios. Oremos…
-Por los matrimonios que tienen dificultades en el diálogo familiar o en obtener el pan para sus hijos y sus hijas. Oremos…
-Por la intención de los obispos: que quienes sufren una enfermedad encuentren manos dispuestas a aliviarlos, sanarlos y acompañarlos. Oremos…
-Por nosotros, que como Pedro queremos encontrarnos con el Señor de la Palabra y el Pan de Vida. Oremos…
LITURGIA EUCARÍSTICA
OFERTORIO:
–Con este MANTEL, limpio y reluciente, queremos revestir en este día la mesa del altar. Que el Señor, cuando venga a este lugar, se encuentre con personas que esperan su llegada.
–Con el PAN y el VINO, traemos nuestras miserias y nuestras conquistas. Nuestras riquezas y nuestros deseos de que el Señor nos acompañe en nuestras luchas de cada día.
CANTO: ¿QUÉ TE PUEDO DAR?
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS:
Con el pan y el vino traemos nuestras vidas ante tu presencia, transfórmalos para que sean el alimento que nos haga llevar a la práctica tus palabras de vida a todas las personas del mundo. PJNS.
PLEGARIA EUCARÍSTICA
PREFACIO:
Gracias, Padre amoroso, porque nos guías en todos los momentos de nuestras vidas. Pero, especialmente, queremos agradecerte que nos hayas dado a Jesús, tu Hijo. Él se nos ha dado como Palabra que alimenta y alienta nuestras ganas de vivir. Él nos ha mostrado cómo la mejor forma de vivir es dándonos a los demás, que entregándonos es como realmente aprovechamos nuestras vidas, que hay más felicidad en dar que en recibir, que la verdadera vida es la que crea vida. Por eso, con todos tus amigos y los que están contigo en el cielo, te cantamos…
SANTO
PADRENUESTRO (cantado en el altar)
CANTO DE LA PAZ: “LA PAZ TE DOY A TI MI HERMANO”
CANTO: (este canto es para antes de la comunión, en el momento de la invitación a participar del banquete eucarístico)
«El Señor Dios nos amó
Como a nadie amó jamás
Él nos guía como estrellas
Cuando no exístela luz,
Él nos da todo su amor
Mientras la fracción del pan,
Es el pan de la amistad,
El pan de Dios.
Es mi cuerpo
Tomad y comed
Esta es mi sangre
Tomad y bebed,
pues yo soy la vida
yo soy el amor.
¡Oh Señor, condúcenos
hasta tu amor!»
CANTO DE COMUNIÓN: “Como el Padre me amó”
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN:
Gracias porque una vez más nos has permitido acercarnos más a Ti, porque nos has alimentado. Haz que este alimento recibido nos de la fuerza para ser testigos de tu Palabra frente a toda la humanidad, para que todos vean en nuestras obras la labor de tus manos. PJNS.
ORACIÓN FINAL:
Tu Palabra, Señor,
nos enseña a vivir.
Nos revela el camino,
nos hace pensar,
nos invita a discernir,
nos ayuda a ser protagonistas.
Tu Palabra está viva.
Compromete,
desinstala,
llama al desierto,
abriga en la intemperie,
enseña a vivir.
Queremos ser, Señor,
testigos fieles,
transmisores auténticos,
discípulos que enseñan
porque se han encontrado
con El que enseña,
y lo llevan adentro.
¡Ayúdanos a vivirlo, Señor!
CANTO FINAL: “Alma misionera”