8º Ordinario

Permítenos llegar a comportarnos como Tú

CANTO DE ENTRADA: “Ven a la fiesta”

MONICIÓN DE ENTRADA:

Bienvenidos a esta Eucaristía. En vez de buscar que la sanen, la persona con la viga en el ojo puede llegar a ser capaz de detectar la paja en el ojo ajeno. Si no soy capaz de mirar al mundo y ver lo que es digno de ser alabado y bendecido, necesito mirar hacia mi interior para detectar lo que me impide ver, y reconocer cómo me puedo cegar y no ver el trabajo de Dios en los demás. Cuando oro por mi pan de cada día, oro también para que yo pueda reconocerlo y aceptarlo.

ACTO PENITENCIAL:

— Tú que nos llamas a hacer posible y visible tu Reino. Señor, ten piedad

–Tú que eres la Palabra que muestra el rostro de Dios. Cristo, ten piedad

–Tú que has sido enviado para dar la buena noticia a los que sufren. Señor, ten piedad

Oración colecta: Padre bueno, permítenos escuchar tu Palabra transmitida por tu Hijo y que podamos llevarla a la práctica todos los días de nuestra vida porque sin tu ayuda nos resulta imposible. PJNS.

GLORIA

LECTURA: Eclo 27, 5-8.

CANTO: Aleluya

EVANGELIO: San Lucas 6, 39-45

HOMILÍA:

Frase para comentar: “Lo que rebosa del corazón, lo habla la boca”

Imagen para comentar: 

ORACIÓN DE LOS FIELES:

–Padre, te pedimos para que la Iglesia sea el depósito de la verdad, que expresa y alimenta su vida y su misión y se fundamenta necesariamente en la Palabra de Dios, Oremos…

–Padre, te pedimos por nuestro Obispo y nuestros sacerdotes, para que en una íntima unión con ellos, formemos una Iglesia diocesana en la que emprendamos el vivir el evangelio, con autenticidad y coherencia, Oremos…

–Padre, te pedimos para que todos los habitantes de esta nación, vivamos de verdad tu Evangelio, y los políticos católicos asuman su responsabilidad de que no deben dar nunca su consenso a la introducción de leyes que vayan en contra de los principios morales y la ley natural, Oremos…

–Padre, te pedimos por nuestra comunidad y para que todos los cristianos, como el Profeta, sigamos anunciando el perdón, el amor y la paz, Oremos…

LITURGIA EUCARÍSTICA

OFERTORIO:

–Seguir a Jesús, el Maestro, y lo tendremos a Él como la luz que guía siempre nuestra existencia. Por eso te ofrecemos hoy, este mural con unos ojos, para que cada uno de nosotros busque siempre con ojos buenos la forma de ayudar a los demás.

–Te ofrecemos Señor esta bayeta, para que nos des a cada uno de nosotros la disponibilidad para limpiar nuestros pensamientos, nuestros sentimientos, nuestras acciones mirándote a ti; comparándonos con tu gesto permanente de amor, de comprensión y de perdón.

–Señor te ofrecemos el Pan y Vino, signo de entrega y comunión fraterna. Que sean para nosotros, y para todos los niños del mundo, Pan de vida y Vino de salvación.

CANTO: ¿QUÉ TE PUEDO DAR?

Oración sobre las ofrendas: Acoge Padre bondadoso la ofrenda que te presentamos y transfórmala para que se convierta en nosotros en el instrumento de tu acción en nosotros. PJNS.

PLEGARIA EUCARÍSTICA

Prefacio: Siempre tenemos que darte gracias por todo lo que haces por nosotros, Padre amoroso. Pero, en especial, por habernos enviado a tu Hijo para enseñarnos cuál es la verdadera vida en tu presencia, cómo podemos vivir mejor si seguimos sus palabras y cómo conseguiríamos un mundo más justo. Por eso, con todos los que están contigo en el cielo, te cantamos…

SANTO

PADRENUESTRO (cantado en el altar)

CANTO DE LA PAZ: “LA PAZ TE DOY A TI MI HERMANO”

CANTO: (este canto es para antes de la comunión, en el momento de la invitación a participar del banquete eucarístico)

«El Señor Dios nos amó

Como a nadie amó jamás

Él nos guía como estrellas

Cuando no exístela luz,

Él nos da todo su amor

Mientras la fracción del pan,

Es el pan de la amistad,

El pan de Dios.

Es mi cuerpo

Tomad y comed

Esta es mi sangre

Tomad y bebed,

pues yo soy la vida

yo soy el amor.

¡Oh Señor, condúcenos

Hasta tu amor!»

CANTO DE COMUNIÓN: “Como el Padre me amó”                                                                                                                        

ORACIÓN FINAL:

Cambia nuestra mirada,
Señor de la Vida.
Acércanos a tus ojos
para contemplar la realidad.
Permite que veamos las cosas
desde el punto de vista
de los demás.
Rompe nuestra cerrazón,
despiértanos
a nuevas mañanas,
abre nuestro espíritu
a la pluralidad.
Enriquece
nuestra manera de pensar
con otras miradas,
otras experiencias,
otros caminos,
otros llamados.
Descúbrenos
lo mejor de los demás
para entender y comprender,
para aceptar y amar.
Abre nuestros ojos
al sufrimiento, al dolor,
a la injusticia
que empapan a diario la vida
de tantos hermanos nuestros.
Danos tu Espíritu, Jesús,
muéstranos tu manera de ver,
aumenta nuestra sensibilidad
para aprender
a vivir en la comprensión.

Oración después de la comunión: Permítenos, Padre misericordioso, poder disfrutar todos los días de nuestra vida de la cercanía que sentimos cuando te tenemos tan cerca y conviértenos en ofrenda permanente a Ti. PJNS.

CANTO FINAL: “Rompe a golpes”